¿Alguna vez habías pensado en esto?
Normalmente, los padres optamos por la inmediatez porque queremos mostrar cariño y amor que sentimos por nuestros hijos, pareja o papás. Sin embargo, si te pones a pensar en qué tipo de vida le puedes dar a tu familia en un futuro por únicamente pensar en el ahora, te sorprenderá la conclusión.
Hagamos la comparación de escenarios de gastar mucho hoy en tu familia vs. lo que les podrías (o no) dar después:
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Llevarlos a las mejores Primarias (las más caras) vs. ¿te alcanzará para la universidad después?
Como padres muchas veces se piensa en que la mejor herencia para los hijos es la educación escolar, gastan en Preescolar, Primaria e incluso Secundaria “caras”. Sin embargo, la pregunta es…. ¿te alcanzará para la Universidad? ¿Para satisfacer todas las necesidades o lujos a los cuales los has acostumbrado? Sería lo ideal y puedes pensar que sí.
Lo mejor que puedes hacer es un plan financiero, en el que te organices con anticipación para poder separar los gastos académicos (incluyendo la Universidad), y si no es posible pagarles Primarias y Secundarias “caras”, pero a cambio tendrás suficiente separado para pagarles la Universidad, entonces ¡vas bien!
¡El cambio está en ti! Solo es cuestión de que te decidas a cambiar tu futuro. Si aún así te es imposible comenzar a ahorrar te invito a contactar a un profesional en el tema que te ayude a descubrir cuál sería el mejor sistema de ahorro para ti.
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Amor gastando en banalidades vs. tranquilidad para tu familia en el futuro.
Se quiere demostrar el gran amor que se tiene por la familia y la mayoría de las veces se gasta en banalidades, las cuales son solo satisfacciones momentáneas (juguetes, videojuegos, restaurantes, celulares de última generación, ropa de marca, viajes, etc).
La mayoría de las veces, nos escudamos en este pensamiento:
-“Quiero que no sufran lo que yo sufrí” Pero, ¿realmente están sufriendo?
Te invito a reflexionar si ¿el amor que sientes por ellos está alineado con lo que gastas en ellos? y si ¿es realmente amor o sustitución?
¿En realidad crees que entre más gastas, más feliz los haces? Hay papás que van a restaurantes, gastan un cuentón, pero se pasan todo el rato en el celular. Recuerda que lo que más importa es el tiempo de calidad, la convivencia y lo que aportas para ellos.
¡Te tengo una excelente noticia!
Si tomas cartas en el asunto sabrás que con una buena educación financiera, el eliminar o disminuir esas banalidades el futuro de tu familia tiene un mejor porvenir.
Pero primero, lo primero. Te preguntarás ¿Cómo ahorrar dinero? Todo depende de la voluntad y las ganas que tengas de cambiar patrones aprendidos en casa, que afortunada o desafortunadamente repetimos al paso del tiempo (aunque no nos gusten mucho). Tu futuro financiero depende de las acciones que realizas en el presente. Es necesario identificar la necesidad vs. el deseo. Tener tus gastos definidos mediante presupuestos que ayuden a lograr el equilibrio financiero, te ayudará a identificar la diferencia entre la necesidad y el deseo.
Piensa en los años que le dedicas a generar dinero, pero si con el paso del tiempo logras separar una parte e inviertes ese dinero, solito trabajará para multiplicarse. De esta forma a mediano o largo plazo encontrarás esa libertad financiera que tantos buscan, y podrás pasar aún mejor tiempo de calidad con tu familia.
Te preguntarás:
¿Cómo puedo hacer algo que no me enseñaron en casa?, ¿Cómo puedo convertirme de gastador a administrador?
Los buenos hábitos financieros no dependen de cuánto ganan las personas, sino de qué hacen con lo que ganan. El tener una buena asesoría financiera te permitirá darte cuenta en dónde estás parado el día de hoy en tus finanzas y cómo puedes organizarlas, para darle lo mejor a tu familia sin dejar el ahorro olvidado.