13 consejos para lograr el éxito financiero
Todos quisiéramos saber la fórmula para ser ricos, ojalá existiera; pero lo que sí existe, son los hábitos que llevan a una buena salud financiera y el primer paso es gastar menos. Por eso, te comparto algunos consejos para gastar menos, tener un buen manejo de tu dinero y un mejor control de gastos, y así te acerques cada día más a tu libertad financiera:
1.- Compra solo lo que necesitas, o terminarás pagando un montón por otras cosas que no pensabas (ni deberías) comprar. Hacer una lista te ayudará para no comprar todo lo que se te ponga enfrente
2.- Eso que vas a comprar, ¿puedes conseguirlo gratis? En vez de comprar un libro, puedes ir a una biblioteca o pedirlo prestado. Ayúdate a no gastar dinero, si lo puedes evitar.
3.- Haz las compras de Navidad meses antes. Lo mejor es aprovechar la época de rebajas, ofertas, descuentos, liquidaciones, etc. y estarás a nada de volverte un master en optimizar tus recursos (ahorrar, en términos más simples).
4.- Evita comprar si no te encuentras bien, puede resultar peligrosísimo “automedicarnos” usando las compras como “remedio” para nuestras “dolencias”.
5.- Vende lo que no uses. Así sacarás provecho a las cosas y ala vez conseguirás más espacio en tu casa.
6.- Lleva la comida de casa al trabajo, está comprobado que resulta más barato y ¡hasta más sano!
El mayor enemigo del ahorro no es el gasto, (contrario a lo que podríamos pensar) ¡son nuestros impulsos! (bueno, que al final nos llevan a gastar), en conclusión es ¡gastar sin pensar! Así que poniendo barreras entre el gasto y tú, te ayudará a darte tiempo para tomar la decisión racional de no hacerlo.
7.- Abre una cuenta de ahorros y emergencias por separado, así no gastas de inmediato y renuncias a la tentación de acabar con todo lo que sabes que tienes.
8.- Aplaza tus compras, verás que cuando pase un rato y te enfries ¡NO las terminarás haciendo! Si son gastos grandes, espera entre 24 y 48 hrs, luego pregúntate si realmente los necesitas (esperemos que no). Un tip para las compras a corto plazo, es pensar qué harías si un desconocido te ofreciera elegir entre el producto que vas a comprar y el dinero que vale; si eliges el dinero ¡ya está! Quiere decir que no lo quieres/ necesitas tanto y entonces ya tienes lo que prefieres tener. De nada.
9.- Si eres de los que tiene el “hábito” de hacer compras online, una “ayudadita” sería poner frenos con alguna app que te impida acceder a las compras sin problemas, como por ejemplo LeechBlock. También te serviría desactivar las tarjetas asociadas a tu cuenta, te dará flojera hacer tooooodo el engorroso trámite para gastar, lo pensarás dos veces, meditarás qué tan conveniente es hacer la dichosa compra y (espero) optarás por desistir de llevarla a cabo. De nada x2.
10.- Qué me dices de las suscripciones que nomás te antojan cosas ¡que ni siquiera sabías que existían! Por lo tanto, si no conoces el producto, no tendrás la gana de comprártelo. De nada x3.
11.- Ok, si realmente quieres ver lo que se siente saber qué puedes comprar y qué no… prueba a pagar sólo en efectivo, y te apuesto que te llevarás una sorpresa sobre lo bien administrado que eres ¡sin saberlo! (La necesidad agudiza el ingenio) De nada x4.
12.- Cuando le cuentas tus buenas intenciones a alguien más, te será más fácil llevarlas a cabo porque tienes una especie de compromiso (moral o qué se yo) que te obliga a no darte por vencido tan fácil, así que no lo dudes, comparte tu proyecto de ahorro con alguien que te motive a cumplirlo (esta vez no me lo agradezcas a mí, sino a tu cómplice).
La misión de ese dinero es ¡conseguir más dinero! Imagina que son soldados de oro y los mandas a reclutar más soldados, debemos hacer que el dinero trabaje para nosotros, y la única manera es adquiriendo activos productivos como negocios, bienes inmuebles, rentas fijas, etc.
13.- Para que veas que no somos tan desconsiderados, ¡tengo una sugerencia para ti! Ya que te hayas estado portando bien y estés implementando el hábito del ahorro, puedes darte una recompensa cada 6 meses, como premio al mérito, solo recuerda: mantener tu hábito del ahorro es algo que te beneficia, no que te daña. Ojo, si recibes un aumento de sueldo, no significa que puedes gastarlo todo sin medida, más bien es una oportunidad para revisar tu presupuesto, aumentar tu porcentaje de ahorro y alcanzar tus metas financieras más rápido que pronto.
Recuerda que la idea no es sacrificar tu tranquilidad al adquirir una deuda y que pagar por el dinero prestado es lo más costoso que hay.
Esto no se ha acabado. Si quieres más ideas útiles, ¡no olvides leer nuestro próxima publicación en el blog!