Los “gastos hormiga” son pequeñas fugas de dinero que, por ser tan frecuentes, a la larga se convierten en una significante pérdida para nuestras carteras. Está demostrado que estos representan el 12% de nuestras finanzas.
El gasto hormiga es sumamente peligroso. Son esas “compritas” que hacen que nuestro dinero se fugue de una forma impresionante, muchas veces, sin darnos cuenta. Pongamos un ejemplo: si gastamos $100 diarios entre el café del día, el antojito y el transporte porque “se me hizo tarde”, estamos hablando de $700 semanales, lo que se convierte en casi $3,000 mensuales… ¿Te imaginas tener casi $40,000 “extras” al año? ¡Es lo que se te está yendo en puro gasto hormiga! Si hacemos la suma, nos damos cuenta del alto impacto que esto tiene en nuestras finanzas, pero, ¿cómo ubicar a los principales “culpables” de que nuestro dinero se “fugue”?
1. Antojos
Uno de los mejores consejos de las abuelas es que NUNCA vayas con hambre a una tiendita o a hacer el super, porque tus compras las vas a hacer con el segundo cerebro: el estómago. ¿Te has dado cuenta que los supermercados tienen las galletas, papitas o botanas, que no forman parte de tu lista, justo en el área de cajas? ¡Ahí está el secreto! Los antojos se pueden vencer si te preparas antes de salir de casa con un lunch, o bien desayunado.
2. No prevenir
Algunos gastos como tomar taxi porque “no sonó la alarma”, o pedir comida a alguna app, se pueden evitar si te organizas un poco. Tomar el camión o ponerte de acuerdo con tus compañeros de trabajo para un “ride”, te puede ahorrar una significativa suma de dinero. El preparase con un lunch desde casa puede eliminar tus gastos extras de media mañana; si te cuesta trabajo levantarte más temprano para hacerlo, intenta tenerlo listo desde una noche antes.
3. Demostrar cariño
A veces compramos detallitos a los seres queridos para demostrarles nuestro cariño, ya sea un juguetito o un helado al sobrino para que se divierta cuando salen a pasear, o dar una propina extra a alguien que se ve necesitado. Todos estos gastos, por más que nos hagan sentir bien, se convierten en fugas de nuestro dinero. ¡Ponte límites!, no estamos diciendo que lo dejes de hacer, pero puedes procurar disminuirlos.
4. Caer en las promociones
Vas al cine, compras unas palomitas grandes y ¿te ofrecen las jumbo por $12 más? O, vas a la tiendita y por $2 más, ¿te ofrecen unos chicles? ¡No caigas!. La mercadotecnia está diseñada para volvernos más consumidores de lo que en realidad somos, este tipo de “promociones”” nos hacen creer que estamos tomando una buena decisión, cuando en realidad es fuga de pesito en pesito que se convierte en una compra innecesaria de la que seguro te arrepentirás más adelante.
5. Vicios
¿Cigarrito mañanero? Los vicios pueden representar un gasto constante como son los cigarros, un café diario, una cerveza semanal, compras online o apostar; gastos que te “obligan” a consumir constantemente. Aunque estos parezcan “pequeños”, al sumarlos, sí representan una gran suma de dinero. Tal vez sea difícil eliminar los vicios, pero podrías trabajar en reducir el consumo.
¿Qué puedo hacer para no caer en los gastos hormiga?
Aprende a observar e identificar los momentos que te hacen caer en el gasto hormiga, ese será el primer paso para comenzar a combatirlos. Sabemos que es difícil eliminar por completo los gastos hormiga, pero, si comienzas con un paso, poco a poco te irás formando una disciplina. Si te cuesta mucho, puedes intentar asignar un presupuesto específico y limitado para este tipo de gastos, ¡la determinación lo es todo!