Pero, ahora con el COVID-19 nos enfrentamos a una educación virtual que inevitablemente, sin ser culpa de los colegios o maestros, disminuye la calidad de la misma, además de que nuestros hijos pierden toda la interacción con otros niños.
Empieza un ciclo escolar nuevo, pero en vez de llevar a tu hijo a su primer día de clases, lo llevas a la sala para que se siente frente a la computadora o televisión.
¿Sientes frustración porque sabes que estás pagando algo que no vas a recibir?
Esta nueva normalidad te va a implicar inversión de tiempo para acompañarlos , darles seguimiento, además del costo de la colegiatura, y para aquellos padres cuyas actividades laborales no les permitan disponer tan fácil de su tiempo, esto será un problema.
Probablemente no sabes qué hacer con tus niños en este año escolar y estás en la disyuntiva de inscribirlos al ciclo escolar o no. ¿Realmente vale la pena seguir pagando tanto?
Cualquiera que sea tu caso, a continuación te dejamos algunas opciones que puedes considerar para disminuir los costos, teniendo los mismos resultados.
Opción 1. Sacarlo de la escuela y perder el año.
Con esta primera opción puedes destinar el dinero que hubieras usado en la colegiatura, a clases extracurriculares como inglés, kumon o inclusive algún deporte.
Tomando esta opción, le darías la oportunidad a tu hijo de aprovechar este año para ganar madurez y fortalecer otros aspectos que, siendo o no académicos, favorecen mucho al desarrollo infantil. Algunos ejemplos son: pensamiento matemático, trabajo en equipo, colaboración social, arte, deporte, finanzas para niños, etc.
Si le proporcionamos un nombre y un objetivo a cada uno nos evitará la tentación de utilizarlo cada vez que tengamos un antojo o una emergencia que podría solventarse de otra manera.
Esta opción es viable para padres que le pueden dedicar más tiempo al acompañamiento de las actividades de sus hijos.
Opción 2. Inscribirlo a un colegio más barato o a una escuela pública
Con la finalidad de que no pierda el ciclo escolar. Con el excedente puedes complementar con clases extracurriculares, para afianzar otras aptitudes y herramientas para la vida.
Esta opción sería una buena solución para padres que su trabajo les impida dedicarle mucho tiempo a sus hijos.
Opción 3. Mantenerlo en su colegio
Complementar su educación con otros aspectos importantes para la vida diaria. Estos los puede obtener dentro del entorno familiar, como colaborar en el hogar, ser independientes en sus necesidades, sin la necesidad de gastar más.
Por ejemplo, puedes hacer una clase de regularización, o integrar a su horario actividades complementarias para que aprendan a cocinar, a ser responsables con sus hábitos o aprender a manejar sus finanzas.
Cualquier decisión que tomes, recuerda que todos los papás están pasando por la misma adaptación forzada a las clases virtuales.
Platicar ideas es necesario para innovar con actividades para los hijos. Pero, algo que sí tenemos a nuestro favor son todas las herramientas que el mundo digital nos ofrece, que pueden complementar la educación de nuestros hijos.
¡Hay que aprovecharlas!